Lucía Betancur para Fuentes Confiables estuvo en las últimas reuniones que culminaron con la reapertura de la Policlínica luego de los tiroteos. Los miedos de los vecinos y los esfuerzos de las autoridades por pacificar esta zona explicados en detalle.

Se retomó la atención a los usuarios en la policlínica de Casavalle luego que el viernes los trabajadores de ASSE representados por el Sindicato Médico de Uruguay, jerarcas del Ministerio del Interior, autoridades la Intendencia Municipal de Montevideo (IMM) y el gremio de la comuna, se reunieron por segunda vez, más de tres horas para analizar la seguridad del barrio.

La primera instancia fue el jueves luego de que los funcionarios de la Policlínica Municipal, ubicada en Leandro Gómez y José Martirené, manifestaran su temor para asistir al centro de salud, luego de un tiroteo registrado días atrás en el mismo lugar. A raíz de esta situación, los trabajadores decidieron no concurrir por dos días.

La alcaldesa del Municipio D, Sandra Nedov confirmó que el viernes 15 los funcionarios  realizarán otra asamblea para analizar la situación de los trabajadores de la policlínica que manifiestan continuar con el servicio. Desde el municipio tendrán un interlocutor único con el Ministerio del Interior para monitorear los hechos que suceden en el barrio y evitar creer en rumores que algunas veces no son válidos.

Fuentes Confiables dialogó con Médicos y funcionarios de la policlínica que prefirieron no identificarse por miedo a represalias, relataron que tanto ellos como los vecinos tienen miedo y no se atreven a denunciar. Una vecina de la zona se acercó al ingreso de la policlínica y lamentó que estuviera cerrada ante el cartel que indicaba que estaba cerrado por reunión de equipo. Al consultarle por cómo se encuentra el barrio dijo que no se lo puede disfrutar, hay dos plazas nuevas con juegos y los niños no pueden jugar, “los muchachos se adueñaron del barrio, ya no se puede andar con tranquilidad”.

Una funcionaria que vive a cuadras de la policlínica dijo que todo comenzó en el 2013 con la muerte de la madre del jugador de fútbol Jorge García (Danubio, Cerro) cuando fue asesinada a la salida de un comercio por un disparo por la espalda. Según la Policía se trató de un ajuste de cuentas, producto que la mujer participaba en una red de narcotraficantes. La funcionaria comentó que se escuchan disparos a cualquier hora y por miedo prefiere llevar a sus hijos a la escuela y liceo que están más alejados de esa zona. Pero no quiere que la policlínica cierre sus puertas debido a que trabaja ahí desde su inauguración en 2014.

Narró como fue el último tiroteo frente a la policlínica, ella estaba trabajando al mediodía cuando ve por la ventana dos motos que intercambian disparos y más adelante uno de los vehículos fue abandonado, en la policlínica generó miedo pero no sorpresa porque saben a lo que están expuestos. También una médica comentó que a algunos de esos jóvenes los atendió cuando eran niños, pero que no los juzga porque el entorno no les favorece y varios tienen sus padres en la cárcel.

Otro funcionario que no es del barrio dijo que siente miedo al trasladarse hasta allí pero no quiere que cierre porque los vecinos la necesitan porque la otra policlínica más cercana es la de Capitán Tula de ASSE y que constantemente escucha comentarios de los vecinos sobre episodios de enfrentamientos o quejas porque las bandas han tomado el barrio.

Una vecina del barrio comentó que luego de las 17 horas hay que tener más cuidado para transitar, unos meses atrás cuando sus hijos salían de la escuela quedaban jugando en la plaza que está frente al centro de estudios pero ya no les deja porque siempre hay jóvenes  que se instalan allí y en la noche siempre se escuchan disparos, aunque reconoce que en esta época del año por los fuegos artificiales se escuchan muchos estruendos que confunden.

El viernes frente a la parada de ómnibus que está a una cuadra de la policlínica se estaba realizando una pequeña feria y en la esquina de la policlínica había una camioneta de la Guardia Republicana y recorría la zona otro vehículo del Programa de Alta Dedicación Operativa (PADO), al consultarle a una vecina si eso era común, dijo que en los últimos días sí y que a veces se ven policías haciendo controles caminando y parando a las personas para solicitarles identificación, pero cuando se hacen controles en conjunto con otros barrios también utilizan helicópteros.

La tensión comenzó en setiembre cuando se registró un nuevo tiroteo en el barrio entre dos bandas: «Los Yinga», liderada por Anthony Rodríguez alias «El Pato Feo» y «Los Camala», liderada por Alexis Correa Jabiel que cayó en prisión, por el triple crimen del barrio Colón, para disputarse el mercado de drogas. El enfrentamiento de setiembre terminó con la muerte de un adolescente de 14 años que integraba una de las bandas y dos hombres heridos.

Luego de la reunión Gustavo Leal, director de Seguridad y Convivencia dijo que a raíz del tiroteo de la semana pasada frente a la policlínica se fortaleció la presencia de agentes del PADO, se envió un blindado y patrulleros. Comentó que la reunión sirvió para despejar dudas sobre el funcionamiento del patrullaje porque se maneja mucha información que no es real.

Valeria Ripoll, secretaria general de Adeom, expresó que el Ministerio del Interior garantizó una mayor presencia policial en la zona para brindar la seguridad al personal médico y funcionarios de la policlínica. También confirmó que no hubo al momento ningún hecho concreto de violencia hacia los funcionarios, pero si los hechos sucedieron a metros de la entrada a la policlínica.

El presidente del Sindicato Médico del Uruguay, Gustavo Grecco, dijo sentirse satisfecho con las medidas que instrumentará el Ministerio del Interior y que esto da garantías para volver a los puestos de trabajo a los funcionarios y el personal médico de la policlínica debido que la situación de inseguridad no es una sensación.

En la reunión también participaron el Director de la Guardia Republicana Alfredo Clavijo, el Director de Gestión Humana y Recursos Materiales de la IMM, Eduardo Brenta y la Directora de Desarrollo Social de la IMM, Fabiana Goyeneche, pero optaron por no brindar declaraciones.

En relación al funcionamiento de las escuelas del barrio, una funcionaria de la policlínica comentó que los centros optaron por abrir sus puertas pero para que los niños concurran al comedor y que algunos maestros ya dieron por finalizados los cursos y hasta entregaron las calificaciones. La alcaldesa Nedov dijo que las escuelas del barrio siempre estuvieron abiertas y que continuarán trabajando con el calendario que estableció primaria con la fecha de finalización de 18 y 19  de diciembre. Explicó que lo que sucedió es que algunos padres decidieron no llevar a los niños a clases ante rumores que generaron temor.

Aquí el informe completo de Lucia Betancur con Aldo Silva: