Uruguay cayó en su visita a Panamá por 86 a 75 en una noche que fue casi totalmente dominado por su rival.
Foto: FIBA
Los dirigidos por Marcelo Signorelli tuvieron una mala noche y se vieron muy superados por el local que, fiel a su estilo de juego, logró concretar muchos puntos rápidos y desde la línea de triples, donde los celestes tuvieron un muy bajo porcentaje.
El partido había arrancado bien para Uruguay, que lo controló y lo llevó punto a punto con una gran efectividad de Esteban Batista, que terminó como goleador del equipo con 22 tantos, y Bruno Fitipaldo que también aportó para conseguir goles fáciles aprovechando los errores en las ayudas defensivas panameñas que todavía no se asentaban en el juego, que se lograron corregir con la entrada de Lloreda para terminar los primeros 10 minutos con un marcador 25 a 23 a favor de la visita.
A partir del segundo cuarto, la selección centroamericana cambió totalmente y salió mucho más concentrada. Corrigió los errores por medio de una defensa mucho más dura, se hizo fuerte en los rebotes ofensivos para lograr varias conversiones de segundos intentos, y bajó sensiblemente el goleo rival. En solo cinco minutos de juego, los panameños impusieron un parcial de 11 a 1 que desequilibró totalmente las acciones para irse al descanso largo con una renta de 9 unidades que desató el calvario uruguayo.
El tercer período fue más de lo mismo. Panamá dominó totalmente y Uruguay intentó defender al hombre y en ocasiones en zona, pero nunca pudo detener el pick and roll de los locales que generó muchas penetraciones para tirar sin marca ante la desazón de los celestes que veían cómo de a poco se agrandaba la diferencia hasta llegar a 20 puntos para encarar el último chico.
En la recta final, hubo un intento de remontada basado mucho más en la garra y rebeldía que en el nivel de juego propiamente dicho, pero nunca se llegó a acortar la distancia a menos de 10 más allá de los esfuerzos que hizo el equipo que encontró mayor intensidad defensiva, pero le fue imposible mejorar los números de goleo ni siquiera aprovechando la cantidad de oportunidades desde la línea fácil que tuvo.
Uruguay dejó pasar una gran chance de llevarse los dos partidos de esta ventana eliminatoria como visitante, aunque haber perdido este último tampoco significa grandes complicaciones y la celeste sigue estando bien posicionada para encarar el difícil camino en busca de un lugar para el Mundial de China 2019.
(Por Christian Moreno)