Arturo de la Cruz Feliciani, conocido como Cacho de la Cruz, nació en Buenos Aires el 8 de mayo de 1937. Es comediante, humorista, presentador, productor y músico argentino; desarrolló casi toda su carrera artística en nuestro país. El histórico conductor de la televisión uruguaya visitó Creer o Reventar: habló de diversos temas y respondió preguntas de la gente. Comentó acerca de su carrera televisiva, las idas y vueltas con su programa éxito Cacho Bochinche, el cual se emitió durante 38 años ininterrumpidos. Además, recordó anécdotas de lo que pasaba semana tras semana en el estudio mayor de Canal 12 (Teledoce).
De la Cruz hizo referencia a los icónicos personajes que participaron en el ciclo infantil; qué relación tenía “El Mono” con su hijo (Maximiliano de la Cruz) y cómo surgió el clásico “golero de Cacho”, que se recuerda hasta este momento. El primero que salió ante cámaras “era armado completamente con resortes”, dijo. Repasó los juegos con los que se entretenía en su propia infancia, desde donde años más tarde salieron varios de los personajes que los uruguayos terminaron conociendo en la pantalla chica, mediante el programa Cacho Bochinche. También explicó cómo surge el nombre del programa infantil que se terminó convirtiendo un clásico en la pantalla de Canal 12. Cacho Bochinche se emitió durante 38 años ininterrumpidos, recuérdese, en sus inicios, en tiempos en que la programación televisiva comenzaba a la hora 18.
Dado que los resultados en cuanto a rating del programa “eran buenos, me dieron vía libre para hacer la producción que quisiera”, explica Cacho. Eso a pesar de los diversos juegos que se realizaban, con una producción importante. Éstos tenían que ver con manualidad, equilibrio o de habilidad, que demandaban un costo fuera de lo normal para una producción de televisión del momento. “Era muy grande. Se hacía todo en Buenos Aires por temas de costos. Hacerlo acá (en Uruguay) es imposible”, señala. Referido a este tema, dijo que “fue desapareciendo ese tipo de programas. Ahora la televisión se compone de cuatro sillas, cuatro personas sentadas, entrevistando a una. Es así. No hay producción”, enfatizó.
Sobre sus preferencias televisivas, dijo que mira programas de naturaleza y Netflix, que la hija se encarga de programarle. No así televisión uruguaya; al respecto dijo que no mira programas uruguayos “de ningún tipo”. Acerca de su relación con los medios, De la Cruz menciona: “no sirvo para hacer radio. No tengo dicción, no soy ‘clarito’; soy atropellado. Hablo más rápido de lo que pienso”, bromeó. Sin embargo, en televisión “juegas más con el gesto y acompañas la palabra que dices con el gesto, entonces es descifrable”. También detalló acerca de sus gustos teatrales, stand up e improvisación. Aunque sobre stand up mencionó que “hay tanto, que entró en un círculo vicioso. Hay muchos” y se repiten varios chistes, dijo.
Arrancó en Buenos Aires (Argentina) su carrera televisiva. Habló de la televisión del momento; mencionó el éxito de Telecataplum y lo que significó en la vecina orilla. Además recordó anécdotas del teleteatro y contó cómo el público reaccionaba ante las producciones televisivas de la época. “En Argentina, Telecataplum marcó un antes y un después en el humor”, asegura. En tiempos que De La Cruz se mudó a Montevideo, los medios de comunicación estaban en un proceso de instalación y de organización. A sus veinte años de edad, en 1958 decide mudarse a Uruguay tras una oportunidad de trabajo: contratado para el Carnaval, por parte de -en ese momento- la Comisión General de Fiestas de la Intendencia de Montevideo.
En Uruguay, comenzó con el proyecto televisivo “Las aventuras de Mister Fantasía”, del cual detalló y explicó cómo fueron los primeros meses, de este lado el Río de la Plata. No lo hizo sin experiencia, debido a que había comenzado su carrera en la televisión argentina; incluso “siendo menor”, había viajado a Centroamérica, Perú, Bolivia y Chile por oportunidades de trabajo. Asimismo, el gerente de Canal 12, Carlos Restano, lo llamó y le dijo: “quédate. Elegí lo que quieras”, a lo que Cacho le respondió que quería “hacer un programa para chicos”, y es así como -años más tarde- en 1972 estaba al aire el programa “Cacho Bochinche”. El icónico conductor argentino destacó en Creer o Reventar que le gustaba “la espontaneidad que tienen los chiquilines. Me divertía mucho”.
Por este programa desfilaron personajes muy recordados como el payaso Pelusita, el enano Fermín, Taraleti y Bobalinda, El tío Víctor y sus marionetas, Las Chinchín, el Loro Bocón y Ultratón. En agosto de 2008 Canal 12 le rindió un homenaje por sus 46 años de televisión, bautizando con su nombre al «Estudio A» de sus instalaciones edilicias. En dicho año se dio por finalizado el longevo ciclo de «El Show del Mediodía», habiendo permanecido por más de 40 años al aire en sus diferentes formatos televisivos.
Luego de 38 años ininterrumpidos, Cacho Bochinche, el programa infantil número uno en la historia de la televisión uruguaya, dejó de emitirse por la pantalla. Ocurrió -entre otras cosas- debido a la gran inversión económica que llevó realizarlo, pero un segmento fue transformado en el programa “Cantando en la Oficina”, que lo llevaron adelante Lucila Rada y Maximiliano de la Cruz. En marzo de 2011 los medios de comunicación anunciaron el cierre definitivo del ciclo infantil, habiendo permanecido casi cuatro décadas al aire.
Al respecto, De la Cruz explica en Creer o Reventar: “dejé la televisión porque me di cuenta que si seguía, iba a dar lástima, porque ya no tenía la ‘cintura’ para la improvisación. Me estaba fallando la memoria, hay que tener mucha retención”. Además “se estaba distanciando el acercamiento con los chicos”, indicó. El último programa fue el 25 de diciembre de 2010. Cacho sabía que era el último, pero no lo dijo en ningún momento ante cámaras. Condujo ese programa como cualquier otro; solo hubo un cambio. En lugar de despedirse diciendo “nos vemos el año que viene”, solo dijo: “¡chau!”. Años más adelante, el conductor del programa en entrevista dijo: “es como si yo quisiera hacerme el campeón al despedir esto”.
Entre otros temas, acerca de actividades en paralelo a su labor en la pantalla chica contó experiencias y anécdotas que recolectó en sus épocas de futbolista: “jugué al fútbol pero no me apasiona como espectáculo. Me ‘hicieron’ de Nacional, pero no me desvivo. Soy un tipo raro”, bromeó. Contó además la particular anécdota de quién y de qué manera lo hizo hincha del club tricolor; recuerda sus años de jugador de fútbol en River (Argentina), donde jugaba como lateral o volante derecho, etc. Por otra parte, dedicó unos minutos para opinar acerca de Carnaval, parodias y homenajes, donde mencionó a Luis Alberto Carballo; aprovechó para recordar que el actual conductor de televisión “fue el primero que movió Ultratón (personaje de Cacho Bochinche)”.
En 2012, en el marco de los 50 años de Teledoce, el canal donde hizo toda su carrera televisiva en Uruguay, le realizó un homenaje dentro del ciclo “Décadas”, conducido por Victoria Rodríguez y su gran amigo y compañero de elenco de “El Show del Mediodía” en sus inicios, Rubén Rada. En 2012 y 2013 no realizó ninguna actividad televisiva. En 2015 confirmó que debido a la no concreción de su vuelta en los últimos años como se había previsto, ha decidido dar por finalizada su carrera televisiva.
(Por Nahuel Marichal)
Escucha la nota de Creer o Reventar: