Pablo Bartol, asesor de políticas sociales del precandidato nacionalista, Luis Lacalle Pou, en Fuentes Confiables afirmó que, de ser ministro de Desarrollo Social, tendría su oficina en Casavalle.
Respecto a la gente en situación de calle, señaló que «hay que actuar. El problema es que el gobierno ha tenido una actitud pasiva. Gente del propio gobierno dijo ‘tienen derecho a estar ahí’. Está claro que los refugios no dan a basto». Indicó que «hay un montón de muchachada que lo ha tomado como su modo de vida. A esas personas hay que darles contención».
Aseguró que «hay que hacer también desde el punto de vista legislativo, internación compulsiva. Estamos de acuerdo en casos graves que están consumidos por la droga. Hay que darles esa ayuda».
«Hay un montón de muchachada que lo ha tomado como su modo de vida. A esas personas hay que darles contención», comentó.
Consultado por las cárceles del país, dijo que «es la peor vergüenza del Frente Amplio. Hay tortura en el módulo 8».
Consultado por qué propuesta tiene respecto a la situación de Casavalle, expresó que «se necesitan más personas trabajando en el territorio. Tal vez no necesitemos tanto técnicos. Sino más referentes del lugar. Un mentor. Un modelo de una nueva generación de políticas sociales».
Afirmó además que «sería un mentor social que atienda toda la familia. Todos los problemas que esa familia tiene. En Colombia ponen un mentor cada 100 familias. Hay 60 mil hogares que están en asentamientos. Habrá que reasignar cargos».
Bartol aseguró que en las primeras medidas del mides, deben «identificar 1200 funcionarios para saber que función cumplen. Lamentablemente el Ministerio de Economía y Finanzas retiró el código que el diputado Martín Lema tenía para ver los contratos del Estado».
Agregó que «hay curros. Pagan 500 mil dólares a una ONG para que controle a otra ONG, para ver si cumple. »
Además afirmó que «el Mides tiene mucho dinero para usar, hay una mala asignación. Mucho cacique y poco indio. Mucho convenio con ONGs que no están cumpliendo su función».