Silvia Copello, educadora sexual y terapeuta menstrual, habló en De taquito a la mañana sobre adicciones al sexo y al amor.

“Las personas que tienen una adicción sexual sufren culpa y vergüenza, por lo general están aisladas porque su vida gira en torno a tener sexo”, explicó Copello.

“Las redes terminan perjudicando a los adictos al sexo, y como tienen la dificultad de no poder saciarse, consumen pornografía en exceso, así como practican masturbación excesiva”, dijo.

“Esta patología es un conjunto de costumbres. Es como cualquier adicción, hay una droga que es el tabaco, y hay gente muy adicta y está esperando para salir a fumar esté en donde esté. El adicto sexual es igual, arriesga su vida, porque no hay un autocuidado, tienen sexo en cualquier lugar, con cualquier persona y en cualquier momento», reveló.

“Lamentablemente en Hollywood se puso de moda la palabra adicta al sexo, y no es así, no es algo pasajero, es una enfermedad, el adicto no tiene autocontrol, debe buscar ayuda”, aclaró la especialista. “Por ejemplo: Britney Spears tuvo que alejar a su cuerpo de baile y adoptar medidas para lidiar con su adicción al sexo. No olvidemos el incidente del ex presidente norteamericano, Clinton. No sabemos si es adicto al sexo pero sí se vieron rasgos, porque tuvo sexo en la oficina oval”.

“En Uruguay hay un grupo de autoayuda denominado DASA, adictos al sexo y al amor anónimos, funciona los lunes, jueves y sábados», dijo Copello.

Escuchá la columna aquí