Recientemente se conoció un informe elaborado por la OMC respecto al barómetro sobre comercio de mercancías. El organismo prevé que continúe la contracción del comercio mundial en esta última parte del año.

Estos datos reactivaron el debate sobre la evolución de comercio global. La economista Sofía Tuyaré, integrante del departamento de Consultoría de CARLE & ANDRIOLI Contadores Públicos analizó el tema..

Aldo Silva – ¿Cómo se comportó el comercio internacional?

Según datos del Fondo Monetario Internacional que elaboró para su informe de octubre de “Perspectivas de la economía mundial”, el comercio de bienes y servicios se desaceleró el año pasado, creció 3,6% en 2018, luego de crecer 5,7% en 2017.

En el primer tramo del año también se observa una importante desaceleración. En el primer semestre de 2019, el volumen del comercio internacional aumentó solo un 1% respecto al valor registrado para el mismo periodo del año anterior. Esto significó la tasa de crecimiento semestral más baja desde 2012.

A.S. – ¿Qué explica este escenario?

La desaceleración responde a varios factores entre los que se encuentra el enfriamiento de la inversión, el impacto de las tensiones comerciales, desaceleración del crecimiento mundial, la situación económica en varias economías emergentes, la creciente incertidumbre respecto al Brexit, la importante caída en la industria automotriz, son algunos de los elementos que colaboraron en la desaceleración del comercio mundial.

A.S. – Respecto a la guerra comercial, ¿se tiene alguna cifra de cuánto fue el costo para el comercio mundial?

Recordemos que desde el año pasado existe un enfrentamiento entre dos actores muy importantes a nivel mundial como Estados Unidos y China. La medida de suba de aranceles de Estados Unidos a algunos productos que principalmente exporta China, generó medidas de represalias, que provocó efectos negativos a nivel internacional.

Según anunció del FMI y el Banco Mundial es importante llegar a una tregua en materia comercial entre ambos países, dado que un factor muy importante de la importante desaceleración que transita el comercio internacional es este hecho. Se calcula que hasta 2020 las pérdidas estimadas para la economía global sean de 700 mil millones de dólares hasta 2020.

Por lo que una profundización de las tensiones comerciales podía endurecer el actual escenario.

A.S. – Recientemente la OMC publicó el Barómetro sobre el comercio de mercancía, ¿qué nos puedes comentar al respecto?

La Organización Mundial del Comercio (OMC) elabora el Barómetro sobre el Comercio de Mercancías, es un informe que brinda datos actuales sobre la evolución de las tendencias del volumen del comercio mundial de bienes.

Los resultados de sus estimaciones concluyeron que el comercio de bienes perdió impulso este año.

Si se desagrega el indicador, se observa que los índices correspondientes a los pedidos de exportación, los productos de la industria del automóvil y el transporte de contenedores se han consolidado en niveles cercanos a la tendencia. Pero los índices correspondientes al transporte aéreo internacional de carga, los componentes electrónicos y las materias primas se han deteriorado aún más por debajo de la tendencia.

El informe aclara que el caso de los componentes electrónicos un factor para este magro desempeño es la subida de los aranceles que afectan a este sector.

A.S. – ¿Qué expectativas hay respecto al futuro de comercio mundial?

Dado el actual contexto internacional que hablamos anteriormente, el FMI en su informe pronostica que este año cierre en 1,1% el crecimiento del comercio global, una tasa muy inferior a los registrados años anteriores.

La OMC también bajó sus expectativas respecto a años anteriores, proyecta un incremento de 1,2% para este año.

Para un país pequeño como Uruguay, es importante el buen funcionamiento del comercio internacional. La contracción de la demanda extranjera tiene efectos en la economía doméstica. Por tanto, las estimaciones de contracción sumada a la compleja situación de los principales socios comerciales del país generan desafíos para los sectores exportadores.

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