En una nueva columna de Lugar a dudas, Antonio Ladra habló sobre la polémica que sobrevoló el caso Moreira y el supuesto ajuste de cuentas por parte del fiscal de Corte, Jorge Díaz.
Por mes en la Fiscalía inicia varias investigaciones administrativas y se encaminan varios sumarios. Por orden del propio Fiscal General, en lo que va del año ya se hicieron tres investigaciones administrativas. En general las investigaciones administrativas y los sumarios son por diversos temas, pero hubo una que levantó polvareda e incluso llevó a que se pidiera la destitución del Fiscal Jorge Díaz.
¿Y ahora qué dirán los que estuvieron persiguiendo al fiscal? La Fiscalía decidió archivar la investigación administrativa ordenada por el fiscal de Corte, Jorge Díaz, sobre Natalia Charquero, la última magistrada en actuar en el caso de los audios de Carlos Moreira.
La fiscal de Carmelo había militado en filas del el Partido Nacional, antes de asumir como tal y había formado parte de una comisión sobre políticas de seguridad en el comando de Luis Lacalle Pou durante la campaña de 2014, en la que también participó Moreira, lo que generó algunas dudas sobre su accionar en el caso.
Era obvio que se debía investigar si había algún inconveniente entonces, luego que la magistrada archivara las actuaciones sobre el ex intendente. Si no se investigaba, la Fiscalía estaba omisa.
Incluso estuvo bien que se ordenara esa investigación, por la propia seguridad jurídica de la fiscal Charquero y de la decisión que había tomado y en la que estaba involucrado un candidato a la intendencia de Colonia y casi seguro futuro intendente, según dicen las encuestas y también para el propio Moreira.
Pero para muchos eso no pareció tan obvio. No lo fue para el senador Guillermo Domenech y el diputado Eduardo Lust, ambos de Cabildo Abierto que pidieron al presidente Lacalle la destitución de Díaz.
No fue obvio para el líder de Cabildo Abierto, Guido Manini Ríos que apoyo a sus dos embajadores, y se sumó al coro de quienes pedían la destitución de Díaz.
No fue obvio tampoco para el Directorio del Partido Nacional, que en una actitud más diplomática su titular, Pablo Iturralde, se reunió con Díaz para saber si la investigación administrativa se trataba de una caza de brujas.
Pero ahora, la Fiscalía no encontró elementos para culpar a la fiscal Charquero de un accionar fuera de lo ético. El instructor de la investigación, el fiscal adjunto de Corte, Ariel Cancela, entendió, tras la investigación, que “no existió ni existe” ningún vínculo de parentesco, afecto o enemistad entre la doctora Charquero con Moreira.
Por todas estas razones, Díaz dispuso la clausura de la investigación administrativa sobre la fiscal. Charquero no conocía a Moreira, ni tuvo vínculo con el intendente, mas allá de una foto que circuló en redes sociales y no solo eso, la investigación reveló que se cumplieron los procesos tal cual están establecidos.
Entonces, ahora que quedó claro, ¿qué camino tomarán en esta ofensiva contra el fiscal Díaz?
Foto: Gastón Britos/ FocoUy