Estabilidad laboral y salarial son los principales aspectos en este preacuerdo.
El gobierno presentó a la Federación Uruguaya de la Salud (FUS) un preacuerdo de cara a la firma de un convenio colectivo con los trabajadores de la salud privada. «Desde julio estamos con esto, queremos terminar con la conflictividad de la salud privada», aseveró Jorge Bermúdez, secretario general del sindicato, tras haberse reunido con el secretario de Presidencia, Álvaro Delgado, y el ministro de Trabajo, Pablo Mieres.
Este preacuerdo, que será estudiado por la FUS, establece que los salarios de los trabajadores serán mantenidos en un convenio de dos años, y también una cláusula de mantenimiento de la estabilidad del empleo por 12 meses, según detalló Bermúdez.
A su vez, explicó que a través de este preacuerdo ninguna institución de la salud privada puede despedir a sus trabajadores por motivo de reestructura, condición que debe mantenerse por 12 meses. «Esto no significa inamovilidad, no pasamos a dirigir las instituciones», afirmó el dirigente sindical.
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Bermúdez hizo hincapié en la importancia de los funcionarios de la salud durante la pandemia del Covid-19. «En el Casmu hay 400 trabajadores en seguro de paro, nos parece un despropósito», sostuvo.
El secretario general de FUS también señaló que tiene la vista puesta en un escenario post pandemia en el que pueda realizarse una reestructuración del sistema mutual «donde haya salarios adecuados a la realidad».
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A pesar de haber recibido este preacuerdo por parte del gobierno, el sindicato mantendrá el paro de este viernes. Sin embargo, no se realizarán movilizaciones debido al incremento de casos de Covid-19.
Foto: Dante Fernandez / FocoUy
