En Uruguay hay dos aplicaciones para repartidores: una entiende que los delivery son empresarios que ofrecen servicios, la otra, según sostienen sus trabajadores, no paga los aportes correspondientes.

Los repartidores se camuflan hace años en el paisaje citadino y, en el tránsito, no solemos volvernos a ellos salvo que sea para quejarnos vehementemente de una mala maniobra. Cuando nos toca ser consumidores, los recibimos ofuscados por una eventual demora o simplemente les respondemos en piloto automático sin fijarnos mucho si lo que le estamos contestando es lo que nos preguntó. Hace unos años, cuando empezamos a ver que cargaban en su espalda pesadísimas mochilas nos dieron lástima, pero como a todo, el ojo se acostumbra y esos uniformes tan distintivos ya no rechinan en las populosas calles de Montevideo. Arriba de la moto van los invisibles, y cada vez son más.

Según un informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en los últimos 10 años la cantidad de aplicaciones que ofrecen servicios de taxi y delivery se multiplicó casi por 10. Así, cada vez son más las personas que ingresan a empleos de este tipo de régimen laboral que, en muchos casos, no es catalogado como un trabajador. Es importante recordar algunos datos:

  • América Latina, junto a los Estados Árabes y África nuclea tan solo el 4% de la inversión en plataformas digitales. El otro 96% se concentra en Asia, América del Norte y Europa.
  • El 70% de los ingresos por estas plataformas se dividen en dos países: Estados Unidos con el 49% y China el 22%. Europa cuenta con el 11% de los ingresos.
  • La mayoría de los delivery, según la OIT, trabajan jornadas largas y de alta intensidad, un promedio de 59 horas semanales. Si se trabajara de lunes a sábado, serían casi 10 horas por día.

En Uruguay hay entre 9 mil y 12 mil delivery y aproximadamente 1800 ofrecen el servicio a través de las aplicaciones disponibles, Rappi o PedidosYa, según contabiliza el Sindicato Único de Repartidores (SINUREP). Actualmente son 400 los repartidores sindicalizados.

De este grupo aproximado de 1800 repartidores que trabajan para apps, alrededor de 1400 trabajan para PedidosYa, confirmó Felipe Álvarez, director de Gerencia de la empresa en Uruguay a Punto de Encuentro. La Diaria publicó el mes pasado en base a “fuentes de la empresa” que solo 100 están en relación de dependencia y el resto ofrecen el servicio independiente.

En abril del año 2018, Andrés Palermo, presidente del sindicato, concurrió al Parlamento y dijo tener datos del Banco de Seguros del Estado (BSE). A propósito de ello, afirmó en diálogo con No Toquen Nada: “Entran tres repartidores por accidentes de tránsito por día, de los cuales uno o dos queda con una discapacidad de por vida, lo que puede implicar un fierro en un brazo o en una pierna, o cualquier otra imposibilidad, sin contar la muerte, porque en varias ocasiones nos ha tocado ir a tapar algún compañero que queda tirado en la calle”.

En diálogo con Punto de Encuentro, Palermo dijo que las cifras no cambiaron y que de 10 accidentes que suceden, entre 7 y 8 son motos y entre 5 y 6 son repartidores. En 2019, Sinurep había apuntado que el 80% de los delivery trabajaban informalmente.

¿Cómo se trabaja en cada aplicación?

PedidosYa

PedidosYa es un emprendimiento uruguayo que nació en 2009 de la mano de Ariel Burschtin (actual CEO), Álvaro García (actual CPO) y Ruben Sosenke. Fue un proyecto de tesis en la Universidad ORT.  Hace 5 años fue adquirida por DeliveryHero, una marca que conglomera más de 50 empresas en más de 50 países similares a PedidosYa. La marca de DeliveryHero en Latinoamérica es PedidosYa y “reportan” a ellos los resultados de productividad.

El negocio en Uruguay comprende a 85 personas que trabajan en oficinas dedicadas a la operación en el país, entre 65 y 70 “pickers” que trabajan en los PedidosYa Market y los repartidores son aproximadamente 1400. «Son independientes pero de alguna manera nos prestan servicios», dijo Álvarez.
Desde el comienzo hasta hace aproximadamente dos años, PedidosYa contrataba a los delivery como trabajadores asalariados, es decir, se los inscribía en un marco de dependencia laboral. Hace dos años, cuenta Álvarez, PedidosYa tuvo una reunión con el ministro de Trabajo de ese momento, Ernesto Murro y le plantearon la necesidad de “cambiar de modelo”. Bajo este cambio de modelo se dejó de contratar delivery y se decidió configurar una relación de independencia entre la empresa y los repartidores.

El exministro Murro no respondió a los llamados de Punto de Encuentro, pero sí lo hizo el exsubsecretario Néstor Loustaunau quien no reconoció esta reunión y dijo que esa resolución va en detrimento de la política del ministerio, que «siempre fue abogar por la dependencia de los trabajadores». Incluso confirmó que su posición personal es que este tipo de trabajadores están bajo un régimen de dependencia de hecho. Se mostró preocupado por el problema que significa esto a futuro para la seguridad social, puesto que estos repartidores no accederán a una jubilación.

¿Cómo funciona el sistema?

Cualquier persona que quiera ser repartidor de PedidosYa deberá inscribir una empresa unipersonal en el Banco de Previsión Social en Literal E.

El literal E es un régimen certificado de pago de tributos para empresas que facturan relativamente montos pequeños. Cabe aclarar que es un régimen diferente de los monotributistas. El primer escalón es el monotributo y el segundo es literal E.

Más allá de los tecnisismos, esto implica que no tienen derecho a ninguno de los beneficios de los que goza un trabajador, dígase aguinaldo, salario vacacional, aporte a la caja jubilatoria, etc.  Se abona menos carga impositiva siendo unipersonal que trabajador dependiente. Si el monto producido por el literal E es bajo, es más costoso elegir este escalón, si es a la inversa es más beneficioso. El literal E debe que pagar un impuesto a la DGI y además un aporte al BPS.

La posición de muchos de los repartidores es que no se los entiende dependientes de la empresa, cuando, en realidad, ellos son “sumamente dependientes”. Hay precedentes sobre esto en Uruguay. En el 2020 un conductor de Uber le ganó un juicio a la empresa probando que él estaba en una situación real de dependencia. La sentencia la dio el Tribunal de Apelaciones del Primer Turno y se tuvo que compensar económicamente al conductor. Este tema es controversial en el mundo y este fallo fue inédito en Uruguay. Esto, de todas formas, no significa que cualquier chofer de Uber o repartidor de PedidosYa que haga un juicio a la empresa vaya a obtener este resultado. Los fallos dependen de la opinión de cada tribunal a la hora de emitir la sentencia, aunque sin dudas sentó un precedente.

Los repartidores transmitieron a Punto de Encuentro las razones por las que entienden que se encuentran en una relación de «suma dependencia» con la empresa. Desde hace un año cuentan con un ranking en donde pueden ver su desempeño y, según cómo haya sido, la prioridad que tendrán para elegir las ocho horas de trabajo para la próxima semana.

Para la evaluación se realiza en horas planeadas versus las reales, las ausencias, la tasa de aceptación de pedidos, la cantidad de pedidos entregados por hora y también se valora positivamente trabajar entre el viernes y el domingo de noche. De acuerdo a cómo se performe en la semana en base a los, se habilita luego la elección de horas y los que hayan posicionado en los lugares 1 y 2 tendrán preferencia para la elección sobre los que quedaron en el tercer y cuarto puesto.

El problema es, sostienen, que desde hace un tiempo a esta parte quienes quedan en la última posición prácticamente no trabajan la semana siguiente, no les derivan «casi ningún pedido». A la luz de ello, argumentan que al ingresar a trabajar a la plataforma se promete que uno va a ser «su propio jefe» y podrá dividirse el trabajo como quiera porque son independientes. Los repartidores entienden que es una contradicción, porque si una semana deciden trabajar menos por cualquier motivo, la semana siguiente están obligados a trabajar al mismo ritmo. Consideran que es una «penalización encubierta». A eso le suman que en algunas oportunidades la aplicación “te pausa”, o sea, si decidieran detenerse cinco minutos por cualquier motivo, eso va en detrimento de las horas trabajadas versus las reales, que significa una peor performance.

Más allá de la discusión jurídica a nivel mundial que esto significa , se vislumbra un problema de comunicación entre la empresa y los trabajadores. Por ejemplo, todos los meses a los repartidores se les descuenta 214 pesos de un seguro que la empresa ofrece, pero todos los repartidores que Punto de Encuentro contactó dieron testimonios similares a los siguientes: “Ah, sí, algo tenemos, pero no sabemos muy bien como funciona”, “yo intenté, pero llamé una vez y…”. Tienen un seguro y no saben cómo acceder.

Los rumores sobre la propina

El descreimiento de los consumidores sobre qué porcentaje de la propina online llega al repartidor es generalizada. Desde repartidores que dicen que no reciben ese dinero aparte que el comprador le otorga a través de la app, hasta los comentarios al respecto en diferentes redes sociales.

Punto de Encuentro no pudo constatar que la propina no llegue al repartidor. En conocimiento de las liquidaciones de distintos delivery a las que el programa pudo acceder, cuando se llega a la parte que desglosa la propina, dice «bruto propinas» y «arancel propinas». Lo descontado entre la primera categoría y la segunda responde a la siguiente aclaración que está debidamente presente en la liquidación: “Recuerda que el arancel de las propinas puede variar entre 1,15% y 4,90% + IVA dependiendo del sello de la tarjeta con el que haya realizado el pago el cliente”.

Este descuento se traduce en valores dependiendo del porcentaje que cobre el sello de la tarjeta. Por citar algunos ejemplos, $270 de propina significan $7 menos, 320$ casi $11 . Esto es totalmente legal. De todas formas, Punto de Encuentro consultó a Felipe Álvarez, director de gerencia de la compañía en Uruguay respecto de estos rumores.

Escuche un fragmento de lo expuesto por Felipe Álvarez sobre las presuntas retenciones de la propina a los repartidores

El representante de la empresa desarrolló: “No hemos tenido reclamos de los repartidores en ese sentido, si alguno en particular siente que no se le liquida, que se ponga en contacto con nosotros inmediatamente. Invito a los repartidores que tengan un problema a que se comuniquen. Que nos llamen porque si hay un error interno inmediatamente lo solucionamos”.

Aseguró que están trabajando para que el sistema sea más amigable para el repartidor, pero «no es tan sencillo». Esta mejora que intentan desarrollar es sobre el momento en el que el repartidor se entera que el consumidor le dejó propina. Actualmente hay dos instancias, en el momento en el que se realiza la compra o después de entregado el pedido, entonces se enteran varios minutos después si se les dio propina.

Rappi

En PedidosYa la relación de la mayoría de los trabajadores es de independencia. En Rappi es diferente. Según lo que pude constatar en diálogo con más de 10 repartidores de la aplicación, el proceder es el siguiente.

Cualquiera que pretenda transformarse en rappitendero debe descargarse la aplicación Soy Rappi, ingresar su nombre, foto de la cédula de identidad y una selfie. Si se pretendiera repartir en moto, también se debe ingresar una foto de la libreta de conducir correspondiente. Generalmente se verifica la información en un lapso de una semana y luego el trámite está listo.

Sobre un lado de la aplicación hay un espacio para ingresar los medios de pago. Se permite cualquier cuenta bancaria, aunque se recomienda una de un banco específico. La siguiente es una transcripción de un diálogo entre Punto de Encuentro y un rappitendero:

PE: ¿Cómo facturan? ¿Cómo servicios personales?

Rappitendero: Vos no facturás, simplemente trabajás. En una parte de la aplicación vas registrando tus ganancias y cuando pasa algún período se hace un corte. Vos venís acumulando de 6, 7 u 8 días, se hace un corte y a los 3 días te lo depositan.

PE: ¿Pero qué impuesto pagan?

Rappitendero: No pagás ningún impuesto. No estás registrado en ningún lugar más allá del vínculo que tenés directamente con la aplicación. Es totalmente informal. No es como PedidosYa que tienen unipersonal.

Luego se le preguntó por la propina online y si la recibían de la forma correspondiente. Respondió que todo lo que el consumidor deja de propina llega sin ningún descuento.

La realidad es que hay una transferencia que no queda clara por qué concepto es: no es por prestación de servicios, porque si fuese tendría que ser bajo una modalidad de factura, el régimen que se exige para cualquier prestación de servicios. Si fuera empleo, de alguna manera tendrían que tener un alta en el BPS y hacer las contribuciones especiales de seguridad social.

Cabe destacar que Punto de Encuentro intentó comunicarse con representantes de Rappi para que ofrezcan su testimonio para este informe. Cuando se ingresa a la página web no hay ningún tipo de contacto de comunicaciones ni prensa disponibles. Logramos contactarnos con una persona parte del equipo de marketing de Rappi Argentina y dijeron que no tenían diálogo ni ningún contacto con la empresa en Uruguay. El día 18 de febrero Punto de Encuentro envió un mail a un correo de Datos Personales de la compañía -era el único que contenía una referencia a Uruguay en su denominación- sin respuesta.

El número de RUT está disponible en la web, por lo que se ingresó a la página de la Dirección General Impositiva para identificar el domicilio fiscal de la Sociedad Anónima que representa a Rappi en Uruguay. Allí debería de estar su base de operaciones, puesto a que tributan en el país y según la página de la DGI, al momento en el que se emitió el certificado el 29 de junio del 2020, se tributaba en regla por todo lo declarado. Desde esa fecha hasta ahora, no ha habido denuncias que llevaran a una nueva fiscalización.

Punto de Encuentro concurrió al domicilio fiscal citado en la web de la DGI en dos oportunidades la última semana y esa sociedad anónima no está ahí. Actualmente reside otro negocio que si bien se instaló allí «hace poco», según dijeron integrantes de esta empresa y otros vecinos del lugar, la sociedad anónima que representa a Rappi en Uruguay tampoco estuvo allí este último año. Por lo pronto no estaba allí en el momento en el que se emitió el certificado de la DGI y que está vigente hasta julio del 2021, según los testimonios que pudimos recoger.

Cada empresa tiene 30 días corridos desde la modificación del domicilio para hacer saber a la DGI que hubo un cambio. De no cumplirse, caben sanciones, aunque la web de la DGI no explicita cuáles. El certificado se emite todos los años, aunque si se abona tood lo declarado y no hay ninguna observación se renueva automáticamente.

Si algún representante de Rappi en el país quisiera ofrecer su punto de vista para aportar a este informe se pueden comunicar directamente a las redes sociales de Punto de Encuentro.

¿Qué va a hacer Uruguay con las regulaciones laborales que hoy preocupan al mundo?

El panorama uruguayo se enmarca en una discusión a nivel global sobre las relaciones laborales del futuro, punto medular del informe de la OIT. La organización llegó a una decena de conclusiones entre las que se destacan la exigencia, promoción y utilización de cláusulas y modalidades contractuales claras y transparentes, el asegurar que la situación laboral de los trabajadores esté correctamente clasificada y la consesión de prestaciones adecuadas de seguridad social.

Se consultó al actual ministro de Trabajo y Seguridad Social, Pablo Mieres, cómo abordará Uruguay esta materia.

Escuche la respuesta de Pablo Mieres

El ministro aseguró que no han tenido ningún tipo de reclamo sindical por presuntas irregularidades en lo que refiere a las propinas en PedidosYa ni a las presuntas irregularidades en la tributación de Rappi. Tampoco se han reunido con el sindicato, pero aseguró que si Sinurep pretendiera pedir una audiencia en el ministerio, «por supuesto» los recibirían.

El miércoles pasado el sindicato único de repartidores se reunió con la bancada departamental del Frente Amplio para exponer su necesidad de tener una base de operaciones. Muchas veces están sentados en la calle y no tienen donde ir al baño. Martín Nessi, referente departamental de izquierda, sostuvo a Punto de Encuentro que hablarán con el ejecutivo departamental para poder cederles espacios de la comuna y que puedan descansar allí.

Escuche el informe de Paula Ojeda en Punto de Encuentro

Foto: Gastón Britos / FocoUy