Un estudio de 2006, citado en el proyecto de ley, informó que el 89% de embarazos con diagnóstico de síndrome de down se interrumpen.

La Cámara de Senadores aprobó por unanimidad este martes la ley sobre “empoderamiento” del diagnóstico del síndrome de Down, que establece que “toda persona cuyo hijo en gestación o recién nacido reciba un pronóstico o diagnóstico de síndrome de Down” tiene derecho a ser informada “por un profesional idóneo sobre las características relacionadas con este síndrome desde una perspectiva objetiva y actualizada”. Fue propuesta por la senadora colorada Carmen Sanguinetti, la frenteamplista Liliam Kechichian, la nacionalista Carmen Asiaín, y el cabildante Raúl Lozano.

Para lograr ese propósito, los hospitales y mutualistas deberán tener profesionales “debidamente capacitados y sensibilizados en el modelo social de la discapacidad”, según explica el proyecto. Esto se debe a que «la forma en como se comunica el diagnóstico tiene un impacto significativo, no solo en como se recibe esa noticia, sino también en la atención temprana y el apego que ese niño pueda recibir por parte de sus padres», indicó la senadora del Partido Colorado Carmen Sanguinetti, en la votación de la ley.

 

Un estudio de 2006, citado en el proyecto, informó que el 89% de los embarazos con diagnóstico de síndrome de down se interrumpen, muchas de esas veces «sin haber recibido información actualizada vinculada a este síndrome, sobre la calidad de vida de las personas con síndrome de Down ni sobre la percepción que las propias personas tienen sobre sí mismas ni la que tienen sus familias”.

Como parte de esta ley, el Ministerio de Salud Pública deberá crear una página con información actualizada de “datos fidedignos y científicamente probados sobre esta condición genética y las posibilidades de desarrollo de las personas con esta condición genética”.