El Partido Socialista se encuentra digiriendo la renuncia del excandidato a la presidencia, Daniel Martínez, ocurrida el 9 de diciembre. El partido busca elaborar mecanismos para retener a dirigentes que deseen dar un paso al costado. El malestar en la interna, nace porque la salida de Martínez se procesó solo como «un acto administrativo». El Ala Renovadora hizo circular una carta expresando su preocupación ante la «sangría de dirigentes».
El documento fue presentado la semana pasada en el ejecutivo del partido, informaron fuentes del Frente Amplio a 970 Noticias. El secretario general del Partido, Gonzalo Civila, tomó posesión del documento y coincidió en la necesidad de elaborar mecanismos para que la salida de los dirigentes no se trabaje como un acto administrativo.
Además existió malestar respecto al tratamiento que se le dio al tema, entendiendo que no era necesario elaborar una carta para esta clase de planteos, «convencidos de que se puede hablar sin hacer notas», ya que «entorpece el trabajo interno del partido y genera filtraciones». La salida de Martínez se trató de un hecho “importante y estaba al caer”, indicaron las fuentes, pero no fue el motivo que dio origen al documento. El foco está puesto en el procedimiento por el cual se procesó la renuncia, porque “se le dio trámite, se comunicó y listo”.
Daniel Martínez fue presidente de Ancap entre los años 2005 y 2010, senador en el período 2010-2015, intendente de Montevideo entre 2015-2019 y candidato a la presidencia por el Frente Amplio en 2019, junto a Graciela Villar.
Foto: Focouy
