Las negociaciones entre blancos, mirando la meta electoral de 2024, avanzan para preparar las definiciones a mitad de este año cuando estén oficializadas las candidaturas. Si bien hay dos nombres claros como Álvaro Delgado y Laura Raffo, gran parte del Partido Nacional espera por las alianzas en la otra ala histórica del partido: el Wilsonismo que quedó huérfano luego de la muerte de Jorge Larrañaga.

La dirigente de Futuro Nacional, que comanda la vicepresidenta Beatriz Argimón, María Victoria Vera, dijo a 970 Noticias que el Partido Nacional “no puede amputarse la pata wilsonista para el 2024”.

“Si queremos ganar las elecciones y mantenernos en el gobierno por dos periodos, algo que no se da hace muchas décadas, necesitamos tener al partido lo más abierto e inclusivo posible”, comentó la joven dirigente blanca.

Los dirigentes nacionalistas se preparan para una campaña electoral similar a la de 1994, cuando Luis Alberto Lacalle de Herrera estaba en el poder y el partido fue a competir con dos figuras herreristas. En esta ocasión Delgado y Raffo vienen de ese “paraguas” partidario.

Sin embargo, del otro lado de la tradicional ala, el Wilsonismo, la dirigencia no ha logrado aglutinarse detrás de una sola figura. En la lista hay varios nombres entre los que Argimón es uno, y ya ha manifestado su intención de asumir una candidatura llegado el caso. Allí también esta el senador y líder de Por la Patria, Jorge Gandini.

Vera sostuvo que la figura de Argimón representa no solo al Wilsonismo, sino que en su reciente tarea política dentro del Partido Nacional –primero como presidenta del directorio, y luego como vicepresidenta– ha logrado sumar simpatías y apoyos a nivel nacional.

«Ella representa otra mirada del partido, lo hizo siendo la compañera de fórmula de Lacalle Pou, necesitamos un partido abierto con diferentes miradas y sobre todo sensibilidades», cerró la dirigente.