El oficial de Interpol detenido fue quien lideró la operación y contactó a un militar de la Fuerza Aérea que debía controlar el escáner por donde pasarían los bolsos con la cocaína.

La Fiscalía General de la Nación determinó que los narcotraficantes le pagaron 30 mil dólares al militar de la Fuerza Aérea para sacar los 603 kilos de cocaína por el Aeropuerto de Carrasco.

Al momento de la carga, el militar tenía asignada la tarea de que el cargamento evada los controles, por lo que este funcionario abandonó su puesto de control en un cuarto cerrado para corroborar que la operativa se estuviera cumpliendo según lo ya acordado. Esta maniobra quedó registrada en las cámaras de seguridad de la terminal aérea.

El oficial de Interpol tenía el día libre ese 15 de mayo, pero de igual modo acudió al aeropuerto para asegurarse de que la operación de salida de la cocaína se hiciera según lo planeado por la banda de narcotraficantes que llevó la droga a Francia, donde fue incautada.

Concretamente fue transportada por el “Cartel de los Balcanes”, una organización narcotraficante de Croacia que opera en todo el mundo con droga proveniente de América Latina.

La Organización Policial Europea informó que la aeronave salió del Aeropuerto de Carrasco con pasajeros, entre ellos se encontraba uno de los jefes del cartel, Ilmija Frljuckic, buscado por la Policía desde 1990.

Según datos aportados tras la investigación, el jet privado hizo escala en Niza, al sur de Francia, donde descendieron algunos pasajeros. Luego aterrizó en el aeropuerto de Mulhouse-Basilea. La droga llegaba a Europa para distribuirse en Suiza, Alemania y los Balcanes.

La fiscal de Ciudad de la Costa, Patricia Rodríguez, solicitó este miércoles la formalización de los tres detenidos. Para el funcionario de la Fuerza Aérea y para el policía de Interpol, pidió 180 días de prisión preventiva. Mientras que para la mujer, expareja del miembro de la Fuerza Aérea, solicitó la pena de 90 días de arresto domiciliario.

El fiscal de corte, Jorge Díaz, manifestó que la utilización del país como tránsito de mercadería de cocaína a Europa no es nueva. Señaló que toda la mercadería que de alguna manera pase por canal verde por la Aduana sin revisión física es una tentación para que estos grupos la utilicen para llevar cocaína. “Eso se llama matriz de riesgo, ahí la Fiscalía no participa”.

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Díaz dijo que la “utilización del país como tránsito de cocaína a Europa no es nueva. La utilización de contenedores no es nueva. Toda mercadería que pase por canal verde por la Aduana, sin revisión física es una tentación para que estos grupos la utilicen para transportar droga”. En esta línea, aseguró que “pasar por un scanner todos los contenedores que pasan por un puerto, es imposible”.