¿Qué impacto tendrá sobre la economía mundial y nacional el Covid-19? la economista Gimena Waller explicó los detalles.
En Punto de Encuentro la Economista Gimena Waller, integrante del departamento de Consultoría de CARLE & ANDRIOLI Contadores Públicos recordó días pasados se dieron a conocer dos informes, uno del Banco Mundial y otro del FMI respecto a las perspectivas de crecimiento de la economía mundial y de nuestro país en particular.
Respecto a las primeras estimaciones de agencias que prevén importantes caídas de la actividad económica a nivel mundial Waller señaló “Así es, el FMI prevé una caída de la producción mundial de 3% en 2020, con EEUU cayendo 6%, China creciendo solamente 1.2%, la zona euro cayendo 7.5%. Tengamos en cuenta que en la proyección anterior se preveía crecer a 3%”.
“Lo que el Fondo detalla es que, en una crisis de este tipo, la política económica tiene un papel muy distinto al de una crisis normal, donde se intentaría incentivar la actividad económica estimulando la demanda agregada lo más rápido posible, pero en estas circunstancias, la crisis es en gran medida la consecuencia de las medidas de contención necesarias, las medidas de aislamiento social”, agregó la economista.
Consultada sobre si el aislamiento es ¿la cura del mal o el mal de males? Waller respondió “El coronavirus está sumiendo al mundo en una crisis sin precedentes, una crisis de la que al menos por ahora la única manera de estar a salvo es el aislamiento social. ¿Y qué significa esto para la economía? Significa que la gente consumo menos, gaste menos, invierta menos, se trata de un shock del lado de la oferta que no tiene comparación. Esto hace que las empresas demanden menos personal y por ende aumente el desempleo.
Pero no todas las personas ven afectados sus ingresos de la misma manera, en ese sentido la economista dijo “Claro que no, una crisis nunca afecta a todos por igual. Muy posiblemente, esta situación si haga que, aunque su nivel de ingresos se mantenga se modifiquen sus conductas de consumo”.
Argumentó, “En una situación así, los productos de primera necesidad son los que compramos primero, los que no dejamos de comprar, y sí prescindimos de aquello que realmente no necesitamos, nos lleva a replantearnos muchas cosas en términos de consumo. Además, ante la incertidumbre, seguramente dejemos aquellas compras que no son de primera necesidad, para más adelante, por las dudas, porque la incertidumbre hace que seamos más precavidos, nos paraliza”.
Ante la consulta ¿En el caso de nuestro país, estamos en un momento clave para el agro como hablábamos la semana pasada con Darío, que nos podés contar de esto? Waller dijo “Esta semana está comenzando en esta zona del país, la cosecha de soja. Cientos de camiones se mueven diariamente por las rutas llevando soja a las plantas de silos y al puerto. El agro es uno de los sectores que no ha parado la actividad, la propia dinámica del sector no lo permite, a las vacas hay que ordeñarlas pase lo que pase, los granos crecen si ya están sembrados, el trigo hay que moverlo a los molinos para que hagan harina y así podría seguir”.
“El agro, como sector clave de nuestra economía y dinamizador, necesita en este momento recoger del campo toda la soja que tiene pronta y poder exportarla. Es clave que las plantas de silos y el puerto funcionen y así también lo entienden las autoridades, ya que de esto depende buena parte de nuestra economía” (directa o indirectamente), agregó.
“Pensemos por un segundo que hubiese pasado con el turismo, si esta emergencia se declaraba el 13 de enero en lugar del 13 de marzo, los efectos en el turismo y en buena parte de la economía, no sé si los podemos dimensionar”, se preguntó la economista.
Escuche el análisis:
En el caso de nuestro país también se prevé una caída del producto
A cerca de esto Waller dijo “El FMI estima que Uruguay va a disminuir su producción en 3% este año, mientras que el Banco Mundial proyecta una baja del PIB del 2.7%. Para el próximo año, cada organismo espera un crecimiento de 5% y 5.5% respectivamente”.
“El Banco Mundial aduce que la gran explicación de esta baja del PIB se da por disminución de las exportaciones, caída del consumo y del empleo. En este contexto, el déficit fiscal se incrementará, se incrementará la inflación (10%) y se depreciará la moneda local (aumento del TC)” señaló.
“El Banco pronostica que en la medida que se levanten las restricciones, la demanda interna y externa van a aumentar y la gran inversión en infraestructura que está prevista va a reactivar la economía a finales de este 2020 y comienzos del 2021”, agregó.
¿A nivel local, que esperan los agentes locales respecto a la evolución del PIB uruguayo?
“El 24 de marzo se publicó la última encuesta del Banco Central y en ese entonces se esperaba que el PIB no creciera (0,0%). La semana que viene se actualizará esta información” afirmó Waller.
“Hoy por hoy, es muy difícil hacer proyecciones con un grado de certeza razonable. El invierno no ha comenzado y eso puede ser un factor de cambio”, argumentó.
“Creo que todos tenemos mucho por aprender de esta crisis, y no tengo dudas que el mundo cambió, la forma que entendíamos y vivíamos la economía cambió. Mucho se habla de que el COVID es un shock temporal, que va a pasar, el tema es cuando, cuánto dura y cuan profundo puede ser su impacto mientras dure”, finalizó.